Viajes - París y Portugal

Portugal, Julio 2017 - O Porto, con pocas horas de sueño

Después de esto viene Portugal, Julio 16 de 2017. Un viaje en donde íbamos 3 y terminamos yendo solo mi hermana y yo. Un golpe de suerte. Viajar con tu hermana, vivir experiencias nuevas, comer, beber y bailar en tierras ajenas, es una conexión profunda. Llegamos a Paris, a las 7 de la mañana, cansadas de no dormir, pero listas para la aventura, buscamos la oficina de nuestro amigo Jack. Jack es un personaje, el vivió en El Paso, básicamente en el dormitorio de mi hermana, pues era novio de la compañera de departamento de mi hermana (una dominicana muy guapa y simpática). Mi hermana y yo confiamos plenamente en Jack… y esta vez no nos defraudó. 

Jack estaba en una junta, así que nos encuentra en el café/bar de la esquina, tomando una copa de vino blanco y foi grass. Una tapita para despertar. La gente se nos quedaba viendo, yo creo que por ser las 10am y estar tomando vino. Pero esa era la actitud. Jack llegó y nos dio la llave de su departamento, un teléfono móvil cien por cien funcional, con internet y todo y nos subió a un Uber para que dejáramos las maletas. Pame y yo nos perdimos por la ciudad, tomamos fotos y vino, y terminamos en el restaurant con Jack comiendo comida casera francesa y más vino… antes de subir al punto más alto de la ciudad y viendo su belleza de noche rodeadas de gente y de rap francés. 

France, Julio 2017 - Que maravilla es tener a una hermana fotógrafa en tus viajes 

A las 7am ya estábamos comprando croissants para llevarnos en el vuelo hacia O porto ¡Que aventura Portugal! No nos imaginábamos nada, no estudiamos nada, no sabíamos que existía el fado, fuimos con recomendaciones de Tam, otra en la que confiamos mucho. Seguimos las recomendaciones, pero a veces nos falló lo de la comida. Los lugares cierran a medio día y no hay cena muy noche. En ese viaje tuvimos que adaptarme a cenar a las 7:30pm en O porto ya las 10:30pm/11pm en España. El viaje a O porto fue breve, nuestra amiga que después canceló, la parecía pérdida de tiempo… pero no lo fue, ver un lugar al menos un día y medio no es pérdida de tiempo. 

Aquello que representa Lisboa para mí: el fado, la vida nocturna y el terremoto. El fado es un estilo de música muy triste, profundo, poético y melancólico. Algo muy presente entre toda la gente portuguesa, jóvenes y viejos. No sé si es por el grupo de gente que conocimos, empezando por el guía turístico que nos recita una poesía en media calle, con todo el sentimiento del mundo, o por qué. Pero sentir el fado, la gente que lo canta y poder entablar una conversación con ellos fue muy enriquecedor. En resumen, pude aprender a apreciar la sensibilidad de los portugueses en Lisboa. 

Las calles de Lisboa, calurosas en esa época del año… interminables cuestas y escalones, se llenan de vida bajo la luz tenue de los faros de las casas. Lo bohemio se huele y la energía se siente. Lisboa para mí es un lugar joven, con alma de viejo. El terremoto de Lisboa de 1755 a pesar de que fue antes de lo que para los mexicanos fue la revolución, se siente todavía en la memoria de los jóvenes portugueses. Lo que sucede es que Lisboa había tenido una larga historia como potencia mundial hasta que llegan los 1500’s – tiempo en que Lisboa pierde su poderío gracias a cambios en su política, esa potencia y afluencia se veía reflejada en la arquitectura de las ciudades portuguesas. En 1755, ocurre un terremoto que destruye la ciudad.

Portugal, Julio 2017 - Alfama y sus comidas comunales 

El guía historiador, dijo algo que me explotó la mente. Dijo: imagínate lo que estaban pensando las personas en ese momento, imagínate como entienden esos sucesos. Las personas queremos comprender las cosas del pasado, con una lupa de modernidad. Pero nuestros antepasados lo veían muy diferente, ellos actuaban según sus ideas… que seguramente creían que eran tan reales como nosotros creemos que las nuestras lo son. En Lisboa en esos tiempos se creía que los humanos eran títeres de Dios y todo lo que pasaba en sus vidas era por gracia divina. Un poco antes del terremoto los portugueses sentían que habían perdido toda su grandeza y que estaban en los peores tiempos del momento. Por lo tanto, cuando sucede el terremoto y dado su contexto religioso, los portugueses creen que había una necesidad de limpia –que dios está limpiando lo que debe de dejar de existir. 

Cuando la ciudad se derrumba, también se prende en llamas por la forma de iluminación en el pasado que consistía de petróleo y fuego. La gente corre al mar para escapar de todo eso. Miles de personas corriendo al agua… y luego viene el tsunami. 

Ese pasado magnífico que no puede volver se traduce a un sentimiento nacional llamado "saudade" – la nostalgia de querer que algo o alguien amado vuelva, pero no poder hacerlo que regrese.  Eso de nuevo se ve reflejado en el fado y en la bohemia portuguesa.

Lisboa, Julio 2017 - Desde el balcón de nuestro segundo airbnb, cerca del metro Martim Moniz

La partida de mi hermana fue un poco apresurada, como de costumbre. Yo le pedí el uber desde el airbnb donde nos estábamos quedando, pero me tenía que quedar arriba por que no tenía internet en la calle. Así que entre gritos y direcciones veo a mi hermana partir. Me rompió el corazón ver que el viaje había terminado y como siempre, el separarme de ella.

Pero a mi todavía me quedaba mucho por recorrer: Mucha España, una probadita de Marruecos y tres lugares mágicos en Turquía. En los siguientes posts hablaré un poco de mis aventuras en estos lugares.